martes, 3 de julio de 2018

cae el cielo sobre los pies
gris como el cemento
nublado como mi vista 
quisiera tener los años del mar
y los ojos de una hoja cayendo 
en pleno otoño/
es de día o de noche?
porque no se sabe del tiempo
cuando se apagaron las ultimas ampolletas
cuando tengo el mismo cansancio 
de ayer o mañana 

domingo, 1 de julio de 2018

Hijas bastardas y sin nombre 
Redes esparcidas a la orilla del pantano oscuro 
Esporas conectadas por un mismo suelo
Pequeñas gotas en las lluvias de los ojos 
Ligaduras y venas del mismo cuerpo
Distintas lunas
marcadas en los senos
Ciegas apoyadas de un baston que no nos pertence
Porque no pertenecimos nunca
A tu orden y patria
A tu amor corrimpido
A la teta vendida
Porque la luz no existe debajo de los techos
Abrazadas de un mismo sol
En la noche interminable
De los siglos de los siglos
El dolor
El dolor
Porque la plaga
Porque la pena
Porque la rabia
Porque el asco Y el llanto
Por las muertes
Por las muertas
Y por las que viven pero en pequeñas tumbas
Porque el virus
cubre cada trozo habitado de cielo
Porque aunque te mire de frente
No nos miramos por dentro
Intentamos ser
La bala certera que atravieza el pecho
El bisturi o el puñal
Porque a nosotras también
el olor a podrido se nos sale por la boca
Dejar de tener
Cadaveres de palabras en la lengua
Y ser maleza en medio de las grietas
Quemarlo todo y recomenzar
Desde la ceniza volveremos a nacer
Porque no se puede contruir
Sobre lo que no ha sido destruido
Paisajes rotos
paradas a medio camino 
Abnegacion rampante 
Dicotomia en el aire
Ambivalencia 
La dualidad te persigue los pasos 
El reflejo en el agua
Peligro de ser dos o cien
Mil noches en mi sombra
Detras de tu cabello
Hay un mounstro
Que se alimenta de recuerdos sordidos
Y mañanas de domingo

Corre norte 
en la ciudad del trueno
corre la niña y se esconde
debajo del techo
zapatos rotos traspasan el suelo
vigilia nocturna en el aguacero 


suspendido el sueño
cuesta cerrar los ojos cuando pesan tanto
a uno le da miedo quedarse asi
medio turnio
medio ciego
de tanta oscuridad

para los perros callejeros 
nuestra casa es la lluvia
los charcos son nuestro cielo estrellado
constelaciones de basuritas
estrellas de plastico y carton
son el firmamento de media noche

la niña descalza serpentea 
entre charcos de barro
perdida y lo sabe
poco le importa
rupturas en los apegos 
conoce los desencuentros a medio camino
por eso poco le importa 
estar sola, es lo unico que conoce
y le sienta bien

catalepsia en estado catartico
ni lo menciones
el frio golpea fuerte las ventanas de los ojos
pero no lo deja traspasar 
el umbral de su inocencia 

la niña baila en el agua 
como pez saltarin en medio de la tormenta 
caen rayos
suenan truenos
relampaguean entre el vestido de la niña 
con su melodia incansable 
vibrando entre las ondas 
del mar en plena vereda